jueves, 3 de julio de 2008

" Musoku No Kokyu "

Cuando los samurais luchaban con espadas reales había un viejo refrán que decía; "Musoku No Kokyu", que literalmente significa, respirando sin respirar. Es importante entender la diferencia entre (respirando sin respirar) y (no respirar). Antiguamente cuando los samurais luchaban, si su oponente podía leer su respiración, también podría leer su movimiento. Por lo tanto, calmando la mente el samurai tenía que conseguir una respiración muy tranquila para evitar que sea visible. Respirando sin respirar es similar a la respiración de Ki.
Debemos comprender que no es bueno para nuestra salud obligar a nuestra respiración a que sea más larga, solamente debemos relajarnos completamente y de esa forma lograremos alargar su duración naturalmente. El propósito de la respiración de Ki no es entrenar la capacidad pulmonar, es solo una práctica para relajarnos completamente.

miércoles, 2 de julio de 2008

Demostración en Vivencia Geisha 2008

Vivencia Geisha es un evento temático que se realiza todos los años en la provincia de Córdoba e intenta recrear la cultura japonesa en todos sus ámbitos. Durante el evento el Sensei Pazos junto a otros miembros de la Federación realizaron una demostración de Aikido Shin Shin Toitsu(Tohei Style), el día 28 de junio de 2008.


La manera de inhalar

La inhalación se llama "Kyuki" en japonés, y significa traer el Ki del universo a nuestros cuerpos.
Manteniendo nuestro cuerpo ligeramente inclinado hacia adelante, comenzamos a inspirar serenamente desde la punta de la nariz (como oler flores). Algunos tienen dificultad porque inhalan rápidamente y su respiración se hace muy corta, entonces para que nuestra inspiración sea más duradera, imaginemos que el aire llena primero los dedos de nuestros pies, la pierna, la cadera, el pecho, y finalmente la cabeza. De esta manera nuestra mente se concentra en otras partes del cuerpo, por lo que nuestro pecho y pulmones no se pondrán tensos. Cuando sienta que la respiración se vuelve lo suficientemente calma regresamos a nuestra posición original enderazando nuestro cuerpo, luego contamos uno, dos, tres, abrimos nuestra boca y comenzamos a exhalar nuevamente.
Aún cuando podamos inhalar y exhalar cómodamente, debemos repetir esto una y otra vez y de esa forma lograremos olvidarnos de coordinar mente y cuerpo y volvernos uno con el universo.